sábado, 5 de junio de 1999

Cotarrismo

(de mi etapa inolvidable en el Grupo de teatro El Cotarro, donde pude conocer a gente tan especial y disfrutar de ese lado tan singular de la farándula, imposibles de percibir desde el oscuro patio de butacas)

Un ejercito de risas, besos y canciones. Mil soldados bajo el mando de un telón. Cierro el cielo, pongo luces, busco inspiración... y enciendo un sueño.
Oigo murmullo... ¡debe haber alguien ahí! La pared de mis temores alberga un gran cuadro. El cuarto impresionismo, de pincelada oscura en el patio de los sueños. Miradas ocultas, que se esfuman con el filtro del calor de un amigo. Es el amigo de mi rol. Personaje de excepción.
El corazón se acelera, llega la hora, llega el sudor, se oye el silencio, y empieza agridulce el regalo de lo imposible. ¿Soy yo, o no soy quien yo soy? Sí, agentes dobles sin más guerra que el amor, la tragedia, la comedia... la música. Melodía de color, flotando de almohada en almohada. Nómadas historias, viajan de corazón en corazón. De creador a espectador. Fabricadas tan sólo con voces de ilusión. Construidas con la más bella de las mentiras, la que nunca fue más humana verdad que la de ese invencible ejercito de risas, besos y canciones
.


(Presentación de "Requiem Rege" en el Ateneo de Madrid, sábado 5 de Junio de 1999)